La comunicación es vital para el buen funcionamiento de cualquier engranaje empresarial, pues de lo contrario existirán relaciones de trabajo débiles, un mal clima laboral y por ende, una mala imagen corporativa.
Cabe destacar que la comunicación empresarial se dirige a diferentes públicos, con los cuales se interactúa de manera interna o externa, por ejemplo, comunicación con empleados y accionistas, o medios de comunicación, clientes, organizaciones gubernamentales, etc.
La comunicación de la empresa es el puente entre la misma y su público por lo cual es importante que ésta sea óptima. La buena comunicación empresarial reduce riesgos, mejora la reputación y genera credibilidad.
La mala comunicación genera un mal ambiente laboral, desmotivación en los trabajadores, desconfianza y por lo tanto mal rendimiento. El diseño de una estrategia para este ámbito es importantísimo para el beneficio de cualquier empresa u organización, aumento de su capital y reputación corporativa.

¿Cómo identificar una mala comunicación empresarial?
Existen varios indicios de una mala comunicación en una empresa, como:
- Se nota una evidente falta de motivación por parte de los trabajadores y colaboradores.
- Se presentan conflictos en el lugar de trabajo.
- Falta de compromiso.
- Desconocimiento de los procesos internos y/o externos de la empresa.
- Poca productividad.
- Mayor rotación del personal.
- Se presentan obstáculos en el flujo de la comunicación.
- Insatisfacción por parte de socios, personal, colaboradores, clientes y el público en general.
¿Cómo contrarrestar los efectos de la mala comunicación?
Hay formas de frenar los efectos negativos que tiene la mala comunicación empresarial y corregirla sin necesidad de procesos complicados:
- Abrir líneas de comunicación entre los empleados:
Deben existir procedimientos internos en la empresa destinados específicamente a la resolución de conflictos o dudas, desde colaboradores y socios, como con la directiva.
Una forma práctica de aplicar esto es mediante un buzón de quejas y sugerencias, donde se puedan expresar los problemas con libertad, con la finalidad de establecer una conversación fluida entre los implicados.
- Aumentar la conexión emocional:
Una parte fundamental de la buena comunicación dentro de una empresa es valorar el trabajo y aportación humana que dan los empleados, pues a través de juntas de motivación, boletines, eventos y reconocimientos se puede llegar a un vínculo emocional que involucra el capital humano y tomar en cuenta sus necesidades.
- Transmitir los valores y la visión de la empresa:
Si bien toda empresa apuntando al éxito tiene definida su visión y misión, no todas saben transmitir estos valores de manera correcta. Es importante que el trabajador se sienta identificado con la organización y se motive a llevar a cabo los propósitos de la empresa.
Lo primero en este caso es integrar al personal en la estrategia corporativa, permitiendo que exista retroalimentación y recompensa. Así mismo, la inclusión en eventos sociales o benéficos aumenta la realización y motivación a nivel más personal.
- Informa a tus empleados:
Es de vital importancia crear sesiones informativas y/o manuales que permitan a los empleados mantenerse al día con los diferentes procesos de la empresa, de esta manera se brinda apoyo y conocimiento al personal.
Cuanto más informado esté un empleado, mejor será la comunicación y su rendimiento.
- Fomentar el crecimiento de tus empleados dentro de la empresa:
La rotación constante de personal es una clara señal de un problema de comunicación y puede afectar a la empresa negativamente de varias formas.
Lo primero es mejorar los procesos de reclutamiento, con una selección minuciosa, luego se debe facilitar una inducción o proceso de integración adecuados, y en cuanto a los empleados actuales, es necesario verificar los resultados de su productividad y valorarlos, ya sea con aumentos, flexibilidades horarias, reconocimientos, bonos, etc.
Los errores de comunicación se pueden corregir pero lo ideal es evitarlos de antemano; una empresa no puede sobrevivir mucho tiempo si existe una mala comunicación interna, pues esto repercute en la productividad, las ventas, la imagen y cualquier otro aspecto corporativo de la misma.